09/Mayo/2021
"Ustedes estudian las Escrituras a fondo porque piensan que ellas les dan vida eterna. ¡Pero las Escrituras me señalan a mí! Sin embargo, ustedes se niegan a venir a mí para recibir esa vida."
Juan 5:39-40 (NTV)
Veamos lo que Jesús le dice a los judíos:
Ustedes estudian las Escrituras a fondo porque piensan que ellas les dan vida eterna. Los líderes judíos que acechaban a Jesús realmente estaban familiarizados con las escrituras, prácticamente dedicaban su vida a aprender lo que estaba escrito. En un principio, la Palabra de Dios les fue dada a los judíos (Romanos 3:1-2) y esto al parecer, para ellos les hacía sentir que ya tenían la vida eterna, pero no les importaba la intención de su corazón o las perversidades que hacían, pues permanecían escudándose en que eran linaje de Abraham (Juan 8:31-41) y que la Palabra les había sido dada a ellos.
Sin embargo Jesús les dice que: "¿De qué sirve, que inviertan tanto tiempo en estudiar las escrituras a fondo si a final de cuentas no aceptan su mensaje principal?", no aceptan y no reconocen que el que estaba hablando con ellos, era el cumplimiento de la misma escritura, por eso Jesús señala: "las escrituras me señalan a mí". Y realmente no es que los líderes pudieran decir que Moisés no hablo respecto al Mesías o, como es que iban acontecer las cosas, y no solo Moisés hablo, sino también los profetas y los salmos (Lucas 24:44). La incredulidad de su corazón no les dejaba ver la verdad.
"Sin embargo, ustedes se niegan a venir a mí para recibir esa vida". Es claro que si los judíos no iban a Jesús para recibir esa vida, es porque no querían, se negaban, amaban más la gloria de los hombre que la gloria de Dios (Juan 12:43). No aceptaban que la salvación fuera por Gracia, ni que tampoco, ellos no tendrían ningún mérito en eso.
Aplicaciones:
- Realmente las Escrituras nos hablan de aquél que nos da la vida eterna, de Cristo, las escrituras son un testigo de Jesús, por lo tanto, no nos cansemos de escudriñar (estudiar a fondo) la Palabra de Dios. Que la diferencia de la forma en que nosotros escudriñemos las escrituras sea, que reconozcamos que no hay otro camino por el que podamos ser salvos, vayamos a su presencia y reconozcamos nuestra incapacidad para salvarnos a nosotros mismos, reconociendo la necesidad que tenemos de ÉL.
- Pidámosle a Dios, que nos molde más a la imagen de Cristo y podamos cada día, negarnos a nosotros mismos.
- Pidámosle a Dios, que abra nuestro entendimiento.
Lizeth Sánchez
Estudiante de Lic. en Enfermería | Líder de jóvenes en su iglesia | Colaboradora del Proyecto Inspira.
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